¿Cómo pesar muestras con precisión?
Para pesar sustancias sólidas o líquidas, semillas, frutos, verduras u otros alimentos, elementos de construcción, animales entre otros, que se vendan de acuerdo con su peso, se requieren básculas o balanzas que nos permitan expresar el peso en kilogramos o gramos. Existen otro tipo de categoría de balanzas o básculas llamadas básculas de precisión que como su nombre lo indica sirven para pesar cantidades de sustancias o elementos con bastante precisión, exactitud y detalle, y tienen una resolución de 0,1g o superior incluso hasta de 0,001g . Están disponibles desde varios cientos de gramos hasta kilogramos y su adquisición dependerá del uso que se pretenda darle.
¿Dónde y para qué se usan las básculas de precisión?
Las básculas de precisión están disponibles en una amplia gama de usos, en el ámbito de laboratorios, producción y control de calidad; son de modelos sencillos y fáciles de manejar y limpiar y son utilizadas en áreas en las que se requiere gran exactitud para valorar los materiales o sustancias, en las que un error por mínimo que sea puede causar alguna distorsión en los procesos de mezclas o reacciones o en la valoración económica de los productos; tal es el caso de las que se usan para controlar la producción y controlar la calidad de los productos de áreas comerciales de fábricas o industrias alimenticias o como las que elaboran el concreto, que incluso pueden ser configuradas con bandejas para ser transportadas al campo sin perder sus características de precisión, con escalas robustas y alta capacidad y con las cuales se pueden obtener resultados científicos específicos.
También más compactas, discretas y visualmente atractivas, con escalas menores se usan básculas de precisión en la alta cocina, algunos de cuyos modelos traen incorporados temporizador y termómetro en la pantalla para controlar los tiempos de cocción; en los talleres de joyería dónde se hace compra y venta de metales especialmente prendas de oro, plata, piedras preciosas y monedas cuyo peso se expresa generalmente en gramos; en áreas de preparación de soluciones como en el campo médico y en farmacias, para el pesaje de sustancias químicas destinadas a la preparación de fórmulas magistrales, así como en áreas destinadas a la investigación y/o docencia en laboratorios o aulas de química, física o biología, lugares en los cuales muchas veces es necesario el pesaje muy exacto de solutos en gramos o incluso miligramos, para la preparación de soluciones o de cualquier sustancia que se necesite para realizar alguna práctica o experimento y para la docencia avanzada en diversas áreas. Las básculas deben ser fiables para obtener resultados exactos.
Las básculas de precisión tienen diferentes funciones que dependen del modelo, la mayoría pueden comunicar datos a computadoras o impresoras y además poseen múltiples funciones de pesaje entre ellas el pesaje porcentual, el pesaje dinámico y el conteo de piezas.
Tipos más comunes de básculas de precisión:
Todas las básculas de precisión están confeccionadas para ser usadas por conocedores o profesionales exigentes y para muchos propósitos, con diseños impresionantes y amigables con los usuarios, que combinan la elegancia con la calidad y proporcionan lecturas rápidas, algunas son resistentes al agua y al polvo, requiriendo poco mantenimiento y otras poseen la función de apagado automático. La mayoría poseen plataformas delgadas, pero con platos de pesaje un poco más grandes y son usadas para pesar paquetes pequeños y sobres o ingredientes para la cocina, también hay básculas de mano para pesajes rápidos, que son bastantes ligeras, delgadas, pequeñas y compactas y se pueden transportar cómodamente a cualquier lugar.
Otros tipos incluyen aquellas que requieren una precisión excepcional para arrojar pesos muy precisos dónde importa mucho la calidad y confiabilidad del pesaje para la obtención de un resultado óptimo y son ideales para pesar medicinas, metales preciosos, pigmentos para el preparado de pinturas, esmaltes, resinas, endurecedores, plomo y sustancias que requieran precisión de miligramos, algunos de cuyos modelos poseen tapas protectoras desmontables y antideslizantes para evitar caídas, que a su vez pueden servir como bandejas para el pesado. Algunos modelos vienen con protector de viento que evita errores en el peso que puedan ser causados por leves movimientos de aire y otros traen incorporado un nivel de burbuja para nivelar la balanza exactamente.
Existen modelos usados en las cocinas que tienen un recipiente plegable de silicona u otro material resistente y hasta sumergible para su perfecto lavado. En este caso la balanza no solo nos ayuda a pesar con exactitud los ingredientes necesarios para la preparación de los alimentos sino que contribuye con nuestra economía haciendo que se gaste solo la cantidad necesaria exigida en las recetas.
Las básculas de precisión también tienen su uso como básculas de baño y algunas permiten no solo determinar el peso sino el porcentaje de grasa corporal, agua corporal, porcentaje muscular y peso óseo.
Las formas pueden ser redonda, ovalada, cuadrada, rectangular u otra dependiendo de la marca y del modelo; algunas usadas en la cocina especialmente en el ramo de la repostería y otras actividades culinarias, poseen forma de cuchara para usar sobre la marcha y tomar directamente los alimentos a pesar, con cuchara desmontable para facilitar el lavado y la limpieza.
¿Qué materiales se usan en la elaboración de las básculas de precisión?
La relación calidad- precio de una báscula de precisión es un factor que hay que considerar en el momento en que se está pensando en adquirirla. Básicamente la calidad está determinada tanto por los métodos de fabricación como por los materiales que se usan. Los materiales más usados para la parte inferior es el aluminio, el acero inoxidable reforzado, que se usa para las plataformas, las tapas protectoras y carcasas pueden ser plásticas de ABS de alta densidad o de acero y el plástico o la silicona de alta calidad se usan para los recipientes de pesado. Algunas vienen con estuches para su protección, que pueden ser rígidos con cremalleras o blandos confeccionados con telas resistentes.
Las pantallas retroalimentadas generalmente son de color azul o verde y pueden arrojar lecturas de varios dígitos, de fácil visualización.